Desde la SAI, saludamos positivamente la creciente visibilidad que Medellín ha ganado como destino turístico, reflejada en el aumento de búsquedas de vuelos y reservas hoteleras, tal como lo reporta TeleMedellín. Este fenómeno es una señal del dinamismo de la ciudad, su proyección internacional y el potencial que tiene para fortalecer sectores como el hotelería, la gastronomía, el transporte y la economía creativa.
Como gremio comprometido con el desarrollo regional, reconocemos en el turismo responsable una oportunidad para la reactivación económica, la generación de empleo formal y el posicionamiento de Medellín como una ciudad innovadora, diversa y resiliente.
Sin embargo, también hacemos un llamado de atención frente a los riesgos que acompañan este fenómeno cuando no se regula y acompaña adecuadamente. La falta de mecanismos de control y seguimiento puede facilitar prácticas indeseables como el turismo sexual, un flagelo que atenta contra la dignidad humana, vulnera derechos fundamentales y deteriora la imagen de nuestra ciudad.
La SAI insiste en la necesidad de contar con políticas públicas claras, interinstitucionales y con enfoque ético, que promuevan un turismo sostenible, cultural y respetuoso, al tiempo que prevengan y sancionen cualquier forma de explotación, especialmente la que afecta a mujeres, niños y jóvenes en condiciones de vulnerabilidad.
Medellín debe seguir siendo un destino atractivo, pero también debe ser una ciudad que se respeta y se hace respetar, donde el desarrollo económico y el bienestar colectivo vayan siempre de la mano con los principios de legalidad, equidad y ética.
Sociedad Antioqueña de Ingenieros y Arquitectos - SAI
